Prospección: pensar en global y actuar en local. Hablamos de ello en la revista INFORMA’T
Esta revista es una iniciativa que pretende poner en valor la formación profesional para la ocupación y destacar la tarea que lleva a cabo desde los centros de formación, el Servei Públic d'Ocupació de Catalunya (SOC), y el mismo Consorci per a la Formació Contínua de Catalunya (CFCC).
Dentro del marco del programa de orientación profesional "Projecta’t", dirigido a personas trabajadoras ocupadas, la revista ha querido destacar en sus páginas cómo Unió Consorci Formació realiza la prospección para captar, retener y potenciar el talento dentro de las organizaciones del sector salud y social.
No te pierdas la entrevista completa, que incluye las voces de los Responsables de proyectos de aprendizaje y desarrollo de Unió Consorci Formació: Esther, Jordi, Àngela y Glòria.
¿Qué significa ser prospectora dentro del sector de salud y atención a las personas?
Ser prospectora es inherente a diseñar e implantar procesos para facilitar todas aquellas iniciativas que permitan mejorar la cualificación y ocupabilidad de las profesiones de un sector. No se entendería una línea de formación o de orientación sin una prospección seria, ajustada y en la que se consideraran todos los interlocutores que entran en juego.
El hecho de formar parte de La Unió y el CSC nos facilita estar siempre en contacto directo con los y las profesionales del sector y nos permite poder conocer, de primera mano, las necesidades del sector, tanto desde el punto de vista de las instituciones como de los profesionales. El sector de la salud y el social se caracterizan, claramente, por incluir la formación continua dentro del ADN de las profesiones, asistenciales o no, y, en este sentido, la prospección se entiende como una necesidad de conocer de manera permanente las necesidades del sector y los retos a corto y medio plazo que permitan formar y capacitar de manera ajustada a los profesionales. El sector que prospectamos se caracteriza también por disponer de profesionales de alta valía, que actúan en muchas ocasiones como expertos trasmisores del conocimiento estableciendo sinergias de formación entre los diferentes profesionales. Este ciclo de retroalimentación del conocimiento es muy enriquecedor y destacable dentro del sector.
¿Qué vinculación tenéis con el sector de la sanidad y atención a las personas en el que os estáis orientando?
Nuestra naturaleza nos permite estar dentro del sistema sanitario y conocerlo en profundidad. Con casi 25 años de trayectoria, la UCF siempre ha estado dentro del sistema, además, nuestra vinculación con el ICS -el ocupador más relevante en sanidad en Cataluña- y con el Departamento de Salud nos facilita una vinculación estrecha y directa con el sector, sin necesidad de intermediarios. Debemos destacar los recursos que se nos destinan desde el Consorci per a la Formació Contínua de Catalunya para poder desplegar una oferta que llegue a todo el territorio y a todos los profesionales, sin diferencias de categorías, que nos permita una vinculación de valor añadido dentro del sector, ya que tenemos la capacidad de paliar las diferentes necesidades que nos expresan y ofrecer programas de orientación y de formación de gran calidad.
¿En qué consiste vuestro día a día como personas prospectoras?
En nuestro día a día estamos en contacto permanente con los y las profesionales de formación y recursos humanos de las diferentes entidades del sector. Aunque principalmente son estos departamentos con los que tenemos más contacto, las Direcciones médicas y de enfermería también están muy involucraadas en el desarrollo de sus equipos y colaboran activamente. Lo habitual es tener reuniones con ellos, tanto de manera presencial como virtual, donde, por un lado, ellos exponen sus necesidades y retos -asociados al plan estratégico, plan de salud y necesidades más organizativas- y nosotros intentamos ajustar nuestro programa de orientación a estas necesidades, para así poder darles respuesta.
¿Habéis hecho prospección en otros sectores? ¿Habéis encontrado diferencias?
No especialmente, nuestra dedicación en torno a la salud y el sector sociosanitario nos ocupa la mayor parte del tiempo, siendo el corazón de nuestra entidad. La realidad es que las necesidades y los recursos que se destinan no son los mismos para todas las áreas que engloba el sector, y es necesario hacer una prospección diferenciada en función de si estamos con profesionales de ámbito hospitalario, de atención primaria, del entorno sociosanitario, el de salud mental..., ya que cada ámbito tiene sus propias características, su realidad actual y su impacto en el conjunto del sector.
¿Cuáles son las principales competencias que debéis tener las personas prospectoras del programa Projecta’t?
Capacidad de escucha activa, sin duda alguna. Se tiene que entender a los profesionales, se ha de escuchar a las instituciones y se debe conocer el sector. Como decía en la pregunta anterior, dentro del sector los ámbitos de atención marcan diferencias: en la especialización de profesionales, en características organizativas y de procesos... y se tiene que conocer bien esta realidad para poder dar una respuesta ágil y adecuada a estas necesidades. Se debe gestionar con eficacia, pero también con eficiencia. Visión estratégica, para poder ver a medio y largo plazo las necesidades y retos del sector y poder ayudar, con programas de formación continua y acompañamiento, a los profesionales que tienen que anticiparse en su preparación y deben reactualizarse de manera continuada.
¿Por qué crees que es importante involucrar directamente a las empresas en la prospectiva en vez de limitarse al análisis de informes sectoriales existentes?
Los informes sectoriales son de gran utilidad en nuestro sector, así como el Plan de Salud o el Plan estratégico de calidad y seguridad del paciente, o los Planes directores, para poder concretar las actuaciones que llevamos a cabo. Nos ayudan a tener una visión del marco más “macro” del sector, a la vez que también nos dejan dibujar las tendencias que hay. Pero también debemos tener en cuenta la realidad más “micro” que explican las y los profesionales del sector, y conocer su día a día desde una visión más operativa de los profesionales. Estos son quienes conocen de primera mano las necesidades del presente, sin olvidar la mirada de futuro. La prospección no sería posible sin las instituciones.
¿Cuáles son las dificultades a las que deben afrontarse las empresas respecto al mercado laboral?
El sector de salud y social se encuentra en un momento complicado, no solo a consecuencia de la pandemia, sino porque la realidad social marca de manera determinante las necesidades en materia de atención y cuidados de la ciudadanía: una población más envejecida con un alto impacto de la cronicidad, entre otras casuísticas, marca la necesidad de recursos y, especialmente, de recursos humanos.
La calidad laboral, la oferta de ocupación y la especialización de los y las profesionales marca un momento caracterizado por la falta de profesionales, en general, pero también por la falta de una oferta más atractiva respecto a medidas de flexibilidad o adecuación a los nuevos tiempos y expectativas de las nuevas generaciones. Resulta cada vez más complicado cubrir puestos de trabajo con turnos semanales si no es con una compensación no solo económica, sino también emocional y personal que compense. Es momento de reflexionar profundamente sobre las posibilidades laborales que se pueden dar desde el sector, para dar respuesta a las necesidades, nuevas características y expectativas de los nuevos profesionales que se incorporan al mercado laboral.
¿Qué información recogida y analizada en la prospección trasladáis a las actuaciones de orientación? ¿Y cómo la transferís?
Compartimos semanalmente las líneas de actuación que llevamos a cabo y las necesidades detectadas en las instituciones con el equipo de personas orientadoras. Conocer el sector de primera mano nos permite trabajar con el equipo de orientación para que asesoren y ayuden a los profesionales en activo a mejorar su desempeño profesional, orientarles en nuevas posibilidades de crecimiento y carrera y conocer la realidad del día a día y, por tanto, nutrir el servició de orientación.
¿Qué es lo que más valoran las empresas que habéis visitado de los encuentros prospectivos?
Las empresas valoran mucho la orientación hacia la mejora competencial de los profesionales, siempre con un espíritu de mejoramiento de las propias instituciones para mejorar también el sector. Desde nuestra posición podemos ayudar, en clave de sistema, a mejorar las competencias y, en consecuencia, a mejorar la actuación en materia de atención a la ciudadanía de los profesionales. Podemos y hacemos networking, compartimos buenas prácticas, mantenemos comunidades de conocimiento y compartimos proyectos de éxito dentro del sistema. Tal como decíamos antes, gestionando los recursos de los que disponemos con eficacia y eficiencia. No podemos olvidar la excelente acogida por parte de los profesionales de los itinerarios de formación de la convocatoria de Conforcat A Mida, que complementan perfectamente el programa Projecta’t. No podríamos definirlo sino como un programa de éxito que permite dar respuesta a las necesidades concretas de cada institución en materia de formación.
¿Cuáles son los perfiles de las empresas más interesantes de entrevistar para obtener información sobre el sector al que pertenecen?
Tanto las grandes instituciones como las de tipo más pequeño nos aportan una visión muy concreta de sus necesidades y sus capacidades, permitiéndonos hacer un dibujo de la situación actual del sector. cada institución conoce bien sus propias necesidades dentro del sistema. En el caso del Institut Català de la Salut, la alianza existente nos permite, de manera privilegiada, conocer la mitad del sistema sanitario y su realidad, ya que es “la gran empresa del sector salud”. No obstante, las instituciones pequeñas y alejadas del núcleo central de Barcelona también nos aportan una visión muy concreta, ayudándonos a tener una visión más amplia de las casuísticas que se dan en este tipo de entidades. Escuchar estas instituciones y conocer la realidad poliédrica de los grandes y pequeños, cercanos y lejanos, nos permite nutrir las actuaciones de orientación que llevamos a cabo. Nuestra experiencia nos dice que tenemos que pensar en global, pero se debe actuar en local.